martes, 13 de noviembre de 2012

Cine de Barrio (Partida y Regreso de una sección)

Vuelve Cine de Barrio y lo hace a lo grande, una sección ya consagrada en este blog y con un tono más serio, con una película que trae nostalgia (por haber visto las tres películas de la trilogía de El Señor de los Anillos), aventuras y mucha, mucha gente de tamaño mediano. Estoy hablando de Los Pitufos 4 por supuesto... es broma, os hablo de la nueva entrega de la reminiscencia de los libros de J.R.R. Tolkien, El Hobbit.

Si has nacido entre 1990 y 1996, te flipó El Señor de Los Anillos. Por lo tanto irás a ver el estreno de El Hobbit como pollo sin cabeza. Con esto quiero decir que el adelanto de la película que voy a hacer a continuación no será para nada necesario, pero para los reacios a verla (motivos muy oscuros hay que tener), aquí lo teneis.

A la cabeza del proyecto está de nuevo Peter Jackson, después de unos problemillas de  venta Merchandising con la New Line Cinema (y de que le llamaran "rata"), se ha rodado también en Nuevo Wellington, (Nueva Zelanda), pueblo que ya casi puede vivir del turismo, y repiten actores de la saga anterior como Gandalf..., y Elrond...y Arwen..., los más grandes vamos. Ah, también sale Legolas por ahí. Bueno, la película va sobre el libro que escribió J.R.R. Tolkien El Hobbit, y la han dividido en 3 partes (por satisfacer a los fans y no por dinero), y la primera entrega llega a los cines en un mes, el 14 de diciembre. Se llama El Hobbit: Un Viaje Inesperado, y nos cuenta el principio de la trama. Poco más que decir de la películas más esperada de este 2012. Aquí os dejo el primer trailer que hubo, que con ese canto que entonan los enanos te deja los pelos de punta.

sábado, 10 de noviembre de 2012

Desde la pista: Experiencia Extremoduro.


Se puede decir más alto pero no más claro, Extremoduro no es lo que era. Tras muchos años tocando con más corazón que cabeza y con más voluntad que talento, la gira "Robando perchas del hotel" ha confirmado el cambio radical que ha sufrido la banda. La música ha tomado la voz cantante, y como consecuencia, se ha abierto un gran abanico de posibilidades tanto en la producción como en el directo. Los cambios como en todo generan controversia, y esta nueva etapa de su carrera tiene tantos detractores como defensores. Evidentemente el grupo ya no es el mismo que conquistaba a las masas con una poesía zafia y una temática callejera. Tampoco se puede decir que Robe haya dejado de escribir con el corazón, más bien todo lo contrario, ahora escribe con más sentimiento si cabe, pero sus letras son mucho más románticas y sensibles, y su voz y sonido mucho más cuidado. Escribo este comentario desde mi experiencia en el Festival EnVivo.

Llegando como cabeza de cartel es muy fácil salir al escenario y comerse el mundo, ¿o no?, bueno el caso es que ante una multitud adolescente y una minoría adulta con mayor preferencia por los temas clásicos y el rock duro, como demuestra el cartel del festival, Extremoduro salió a sorprender. Ya había avisado Robe de que le apetecía bastante tocar La Ley Innata de principio a fin, y cumplió con su palabra. Subió al escenario mientras la banda tocaba "Hay poco rock'n'roll", y dio comienzo al concierto con unos cuantos temas imprescindibles de su discografía, conocedor de que no era necesario tirarse al vacío desde el primer momento. Cabe destacar la interpretación de temas inéditos como "El pájaro azul" o "Contra todos".   En estos primeros minutos el público enloqueció y liberó todo lo que tenía guardado para recibir a su ídolo. También merece la pena que mencione cómo sabe medir los tiempos el extremeño, de principio a fin juega con el público y su repertorio, cada canción tiene su lugar y su momento. Tras una pausa comenzó el plato fuerte, La Ley Innata, un espectáculo audiovisual que personalmente me cautivó. Lo que allí aconteció fue mucho más que un concierto, fue una experiencia sensacional. Las letras de las canciones cobraban vida en la pantalla del escenario con imágenes perfectamente elegidas para la ocasión. Por momentos la mente se olvidaba del concierto y simplemente se limitaba a sentir la música. El punto álgido de este espectáculo llegó con "El cuarto movimiento: La realidad" que fue interpretado en pantalla por una traductora al lenguaje de signos. Para finalizar el concierto, Robe volvió a tirar de clásicos con los que el público se divirtió y agradeció a su ídolo la gran noche vivida.

En definitiva, el grupo ha evolucionado para mejor, ahora abarca más registros y lo hace la soltura y el talento de los mejores. Sus canciones siguen siendo geniales, pero en directo pasan de himnos a experiencias místicas. Esperemos que sigan muchos años, porque el rock español se queda muy pobre sin ellos.

Quiero agradecer en este post el trabajo de Johnny que ha llevado el blog a dimensiones que jamás imaginábamos con esfuerzo y mucha ilusión, mientras nosotros pasábamos por un largo periodo de ostracismo, va por tí jefe!